Una mano amiga
La mano es un elemento crucial en la evolución del hombre. Esta hace posibles muchas acciones: podemos escribir, tocar un instrumento, acariciar, sujetar objetos con firmeza, construir y crear. Cada dedo de la mano tiene una función propia fundamental y, en su conjunto, los dedos cooperan de manera íntegra, tal y como nos recuerda san Pablo, en un sentido más amplio, en su carta a los Corintios (1Cor 12,12-27).
En los últimos años, bajo la dirección del cardenal Fernando Filoni, Gran Maestre, hemos trabajado en el seno de la Orden del Santo Sepulcro para que nuestra Institución Pontificia sea cada vez más consciente de sus objetivos, haciéndolos explícitos a través de una serie de documentos e iniciativas que nos acompañan en la profundización de nuestra identidad y que constituyen elementos importantes en la vida de la Orden, algo así como los cinco dedos de la mano.
A partir de los nuevos Estatutos, aprobados por el santo padre en 2020, el cardenal Gran Maestre trabajó después, durante el confinamiento por la COVID, en el libro sobre la espiritualidad (Y toda la casa se llenó del aroma del perfume: Para una espiritualidad de la Orden del Santo Sepulcro) que ha proporcionado a los Caballeros y Damas – así como a particulares y otras instituciones – una importante herramienta para reflexionar sobre el proyecto de vida, los valores y las opciones que definen el camino de la Orden.
El siguiente dedo es el del estudio detallado y las directrices relativas al Ritual de las celebraciones que, a través de los símbolos que las componen, brindan la oportunidad de entrar en profundidad en la misión que nos caracteriza. Entonces, la Consulta 2023 se centró en la formación. A su vez, el cardenal Gran Maestre trabajó en un texto final que integrara las ideas y experiencias que los Lugartenientes y Delegados Magistrales tenían acerca de este tema. Finalmente, este texto se distribuyó durante el verano.
El último dedo de nuestra mano es el Reglamento general, que está en su fase final de revisión y estará disponible dentro de poco.
Algunos verán esto como algo nuevo o diferente. En realidad, las herramientas que se nos ofrecen son una manera de implicar de forma activa en el mundo actual a una Orden que posee una historia muy larga.
Existe una imagen bíblica muy significativa: Jesús habla del grano de mostaza que, «al sembrarlo en la tierra, es la semilla más pequeña de todas las semillas; pero después de sembrada crece, se hace más alta que las demás hortalizas y echa ramas tan grandes que los pájaros del cielo pueden anidar a su sombra » (cf. Mc 4,31-32).
Este pequeño grano de mostaza ya contiene todos los genes del árbol. Tan solo hay que regarlo, cuidarlo y darle tiempo para que crezca. De ese pequeño grano crece el gran árbol que hoy conocemos. En resumen, el grano ya lo contiene todo, todas las características están presentes in nuce y simplemente se explicitan en la forma concreta que adopta la Orden en la actualidad.
Agradezco que el cardenal Gran Maestre haya querido ayudarnos a desarrollar de forma más clara los cinco dedos de esta mano de la Orden, lo que nos permite actuar con mayor consciencia, confiando en nuestra identidad de Miembros, cuando tendemos la mano a nuestros hermanos y hermanas de Tierra Santa para estar cerca de ellos, apoyándoles con la oración y la caridad.
Leonardo Visconti di Modrone
Gobernador General