Taybeh, el pueblo cristiano palestino donde florece la caridad creativa

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Taybeh - 1 Tras la resurrección de Lázaro, Jesús habría pasado un tiempo en Taybeh con sus apóstoles.

Entre los proyectos apoyados por la Orden y finalizados durante los primeros seis meses de 2025, tres benefician a la población de un pequeño pueblo palestino completamente cristiano, algo poco común en Tierra Santa.

«Taybeh —relata con énfasis el padre Bashar Fawadleh, sacerdote latino—, es la Efraín bíblica a la que Jesús decidió retirarse: “Por eso Jesús ya no andaba públicamente entre los judíos, sino que se retiró a la región vecina al desierto, a una ciudad llamada Efraín, y pasaba allí el tiempo con los discípulos” (Jn 11,54). Taybeh es también un lugar al que san Carlos de Foucauld viajó en repetidas ocasiones y escribió su “Retiro de Cuaresma” ».

Se presenta como un pequeño oasis, un lugar de oración y vida cotidiana para sus 1350 habitantes, así como para quienes están de paso o deciden establecerse allí, como el patriarca latino emérito de Jerusalén, Su Beatitud Michel Sabbah. El padre Bashar continúa: «Taybeh es un pueblo con un gran corazón y una larga tradición de hospitalidad. Aún hoy, cuando las circunstancias lo permiten, muchos grupos de peregrinos hacen una parada aquí. Son recibidos en el complejo parroquial latino de la pensión “Charles de Foucauld” y, los domingos, participan en la misa parroquial y se encuentran con las piedras vivas de la Tierra de Jesús. Para nuestra comunidad, es un soplo de aire fresco que nos recuerda la importancia de nuestra presencia cristiana en Tierra Santa».

La situación en los pueblos palestinos es muy difícil de sostener, y el sacerdote no oculta la gravedad del panorama. La guerra tiene un impacto devastador, visible y trágico en Gaza, pero también en Jerusalén y Cisjordania. Los palestinos sufren, sobre todo los jóvenes, quienes anhelan mayor libertad y a quienes les cuesta mantener la esperanza.

Taybeh - 2 Niños de Taybeh representando una escena, vestidos con trajes típicos palestinos.

«Cuando los colonos les impiden cosechar aceitunas en sus propias tierras —explica el padre Bashar— ¡usan la violencia! Lo mismo ocurre cuando el ejército instala barricadas que, sin motivo alguno, les impiden desplazarse entre las ciudades de los territorios palestinos, obstaculizando incluso ir a trabajar. Ese anhelo de libertad es a veces demasiado fuerte, lo que se hace visible en el deseo de los padres de ofrecer a sus hijos un futuro mejor. Así pues —concluye—, desde el 7 de octubre de 2023, once familias ya han abandonado Taybeh».

En este contexto, la Orden, en coordinación con el Patriarcado latino de Jerusalén, ha apoyado tres proyectos en beneficio de la comunidad local: uno en una de las escuelas, otro en una residencia de ancianos y un tercero en un convento.

En una de las dos escuelas del Patriarcado, se llevaron a cabo trabajos de renovación en las áreas de juego, que se encontraban en mal estado y representaban un riesgo para los niños. Hoy, toda la zona se ha modernizado, asegurado y equipado con nuevas estructuras de juego, barreras de seguridad y un sistema de iluminación adecuado para las horas de la tarde y la noche. De hecho, el espacio no solo está disponible para los estudiantes, sino también para todos los jóvenes y feligreses, pues la escuela funciona a su vez como un centro comunitario que ofrece actividades culturales, deportivas, espirituales y sociales.

Taybeh - 3 El padre Bashar Fawadleh, párroco de Taybeh, visita a los feligreses en la residencia para personas mayores Beit Afram, apoyada por la Orden del Santo Sepulcro.

El segundo proyecto concierne a la residencia de ancianos Beit Afram, en Taybeh, gestionada por las Hermanas del Verbo Encarnado. Fundada en 2005, ofrece un entorno en el que las personas mayores reciben cuidados, se sienten felices, mantienen su independencia y están integradas socialmente. En la actualidad, el centro cuenta con 24 residentes y 25 empleados, y su misión se centra en permitir que las personas mayores vivan esa etapa de su vida con dignidad, en un contexto donde puedan seguir contribuyendo y participando activamente en la vida de la comunidad. En 2019, Beit Afram recibió una notificación del ayuntamiento que le obligaba a cumplir con las normas de seguridad locales: prevención de incendios, procedimientos claros de evacuación, un sistema integral de llamada a enfermería y una cobertura de seguro adecuada. Las obras de mejora, financiadas por la Orden del Santo Sepulcro, comenzaron en 2022 y finalizaron en febrero de 2025.

Por último, el pueblo de Taybeh también alberga uno de los conventos de las Hermanas del Rosario, una importante congregación femenina fundada en Jerusalén en 1880 y que, desde entonces, acompaña con devoción la vida de las comunidades cristianas locales. Lamentablemente, el convento de Taybeh se encontraba en malas condiciones. Las obras, finalizadas en abril de 2025, permitieron a las religiosas contar con una casa con nuevas instalaciones sanitarias y, entre otras mejoras, un sistema eléctrico acorde a las normas y eficiente en el consumo energético.

Es evidente que las necesidades son muchas, y seguimos teniendo muy presente la realidad de Taybeh, así como la de las demás comunidades de Tierra Santa dentro del Patriarcado latino. El padre Bashar concluye con un mensaje especial para los jóvenes: «Se han creado trece puestos de trabajo, especialmente para jóvenes, con el fin de animarlos a permanecer en su región, donde puedan ganarse la vida y mantener a sus familias. Asimismo, hemos puesto en marcha el proyecto de vivienda “San Carlos de Foucauld” para que las parejas jóvenes puedan comprar una casa en Taybeh y construir su futuro. Todo esto implica costos e inversiones, y para ello necesitamos apoyo».

 

(Junio de 2025)